El apóstol Pablo escribió estas palabras estando en prisión casi a punto de ser decapitado, ¿Crees que esto era un momento angustioso para Pablo? ¡Claro que sí! pero él había aprendido a depender totalmente del Señor Jesús, su vida estaba marcada por su amor y aún en esos momentos dijo: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece».
¿No será lo que tú estás pasando sea algo similar a lo que el apóstol Pablo enfrentó? ¿De vida o muerte?
Jesucristo es la fuente inagotable de fortaleza para nuestra vida y eso lo demostró muchas veces en los evangelios.
En el caminar de la vida cristiana no todo será de color rosa, es decir, no todo será fácil, a veces será probada nuestra fe, y quizá nuestras oraciones no tengan respuesta inmediata y es donde estaremos experimentando «el silencio de Dios» ¿aún podremos decir estas palabras?
No debemos de caer en el error de pensar. ¡Dios ya no me escucha! recuerda: «cuando Dios está en silencio es porque está trabajando».